Se llama Jacob, tiene seis años y padece autismo. Su madre cuenta a Abc News que todos los jueves dedica la lectura de relatos a los canes de una protectora en California para que ellos no se sientan solos.

Los profesionales del mundo animal y los amantes de dichos seres conocen de sobra los beneficios de las relaciones entre perros y humanos que reportan a nuestra salud mental. No obstante, que se demuestre más allá de la ciencia en historias reales, en casos cotidianos de personas alrededor del mundo, es sencillamente emocionante.

Es el ejemplo de Jacob Tumalan, un niño californiano de seis años que tiene autismo. Su relación con los animales surgió de forma más bien fortuita con un cachorro de la familia. Esta amistad manifestó tantas ventajas que decidieron aprovechar la puerta abierta que les brinda Jacobs y así tener más amigos perrunos.

Su madre Katie Tumalan cuenta a Abc News que el primer acercamiento con los perros fue gracias al cachorro de su tía Lisa Dekowski-Ferranti. Jacobs comenzó un día cualquiera a leerle uno de sus cuentos sin que la familia se lo propusiera antes.

No obstante, comprobaron lo positivo del ejercicio tanto para el niño como el perrito. Los dos conseguían relajarse notoriamente y especialmente a Jacobs le valió para mejorar sus habilidades lectoras. Pero lo más importante es que logró alejarse un poco del recogimiento que provoca el autismo.

Por eso, la tía decidió llevar a Jacob a la protectora Carson Animal Shelter en la que ella y su hija hacen voluntariado para que conociera a más canes. Katie Tumalan afirma que su hijo ha tenido siempre un gran problema con los ruidos y una gran cantidad de actividad a su alrededor. Cuando Jacob está en la protectora llega a concentrarse asombrosamente y puede salir de su bloqueo. Algunas veces se tapa las orejas, pero está en armonía mientras lee sus libros a los perros. Para su madre eso es maravilloso.

Por su parte, los canes también han respondido favorablemente a esta acción. Así pues, la hija de Lisa Dekowski ha emprendido el programa “Rescue Readers”. Una iniciativa consistente en que un grupo de niños visite periódicamente la protectora para leer libros a los perros, la cual se espera que esté lista para este verano.